El Talante Samario

Por Arzario

Con las elementales e innegables particularidades de cada individuo, el samario responde bien al estereotipo caribeño: alegre, bullicioso, francote, amiguero, “mamador de gallo” (la palabra mamagallista no es costeña: se trata de un reciente cachaquismo), a veces tosco en su trato y lenguaje, en apariencia pero no grosero ni agresivo: incluso, a veces hasta resulta simpático ese trato.

El samario es inevitablemente marino: las innumerables, variadas y hermosas playas enmarcan la ciudad produciendo (sigue...)

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